11 jul 2011

DESPIDOS MASIVOS EN UNISONO



La sucesión de despidos que se vienen produciendo durante los últimos tiempos en Unísono es más que preocupante. Para que os hagáis una idea, Valencia ha pasado de tener 310 trabajadores en enero de este año a 276 en mayo. Gijón que era la única ciudad que hasta ahora se había librado, perderá 35 puestos de trabajo la próxima semana, lo que supone más de un 10% de su platilla. El caso de Vigo es especialmente sangrante, empezaron el año 2011 con 926 trabajadores y solo 5 meses después solo les quedan 593 de los que hay que descontar 151 indefinidos (VODAFONE Y FRANCE TELECOM) que irán a la calle antes del 24 de julio por la aplicación de un ERE, además, casi otros tantos serán despedidos por las finalizaciones de VODAFONE ADSL y FRANCE TELECOM VOZ Y DATOS, total que al finalizar este mes habrán perdido su empleo dos terceras partes de los trabajadores de Vigo.
 
En Madrid pasa más de lo mismo. A los fines de obra en las campañas de TRAVEL CLUB, VODAFONE CANAL y ZENDIS hay que añadir los despidos por artículo 17 en GAS NATURAL, IBERDROLA y FRANCE TELECOM. Hemos pasado de tener unos 4.250 trabajadores en enero de 2011 a ser ahora mismo poco más de 3.500, lo que supone que hemos perdido 750 puestos de trabajo en un suspiro. A nadie se le oculta tampoco que estos despidos vienen propiciados, además, por la deslocalización que la propia Unísono está realizando para muchos de sus servicios, trasladándolos a un precio menor a los centros de Chile y Colombia.
Sin embargo, Unísono ha tenido resultados record durante el ejercicio del año pasado, obteniendo beneficios limpios de polvo y paja por importe de 5.267.000€ (unos 1.000.000.000 de las antiguas pesetas) y casi duplicando lo que ganaron el año 2009. Por tanto, la empresa no vive un momento de crisis económica. En absoluto. Más bien, han decidido aprovechar el ambiente general de “estamos en crisis” para perpetrar profundos cambios respecto a la plantilla con el único fin de ganar aún más, y hacerlo aún más rápido. Mientras en unas provincias la empresa hace indefinidos “a dedo” en otras decide a quién deja en el paro, mientras se contrata a gente de la calle para nuevos o viejos servicios