El
pasado 24 de abril, nuestra compañera Laura Gómez, secretaria
de organización de la federación local de la CGT de Barcelona, fue
detenida em plena vía pública. El 25 de abril, fue puesta a
disposición del juzgado como presunta autora de un delito de
coacciones, desordenes públicos, delito de incendio, y subsidiario
de daños, contra los derechos fundamentales. El ministerio fiscal
solicitó la prisión provisional, comunicada y sin fianza y el
juzgado decretó su ingreso en prisión dada la gravedad de los
hechos y evitar el riesgo de fuga.
Los
“graves delitos” de los que se le acusan son haber participado el
día de la huelga general en una teatralización en la puerta de la
Bolsa de Barcelona, en las que se quemaron simbólicamente unas cajas
con papeles dentro.
La
única realidad es que la compañera Laura ha sido detenida por ser
sindicalista, por ser una luchadora contra el sistema capitalista que
nos explota.
Laura
permanece encarcelada, sin posibilidad de fianza, todo esto debido a
unos responsables políticos que están generando un estado
autoritario y dictatorial, para acabar con los derechos y libertades
de la población.
Junto
a Laura están siendo detenidas muchas otras personas durante estos
días en Barcelona, Valencia, Madrid, Tarragona, etc. Su único
crimen es el haber participado en la Huelga General del 29 de marzo.
La
CGT advierte al estado que va a seguir ejerciendo sus derechos
fundamentales. La CGT no cesará de llevar a cabo su responsabilidad
entre los trabajadores y en su defensa por la justicia social. Los
trabajadores no somos delincuentes.
El
próximo sábado 5 de mayo, a las 12:00 horas en el Obelisco, la CGT
convoca una concentración para exigir la libertad de nuestra
compañera Laura.