Hemos
llegado al punto de que venir a trabajar es insufrible, la empresa en
su afán de exprimirnos para sacar de nosotros el máximo beneficio
posible, está asfixiándonos, pidiéndonos objetivos imposibles,
acosándonos continuamente con auditorías con las que sólo
persiguen sancionarnos.
El
resultado de todo esta presión indiscriminada está manifestándose
en muchos de nosotros: ataques de ansiedad, bajas por estrés,
depresiones,... y un largo etcétera de males que afectan a nuestra
salud.
Poco
parece importarles, cada vez cobramos menos, pero nos exigen más y
en menos tiempo.
Desde
la
CGT
consideramos
que el sistema de Auditorías que esta déspota empresa está
utilizando es ILEGAL, ya que supone un acoso a todos los
trabajadores, es desproporcionado y sólo persigue sancionarnos, y no
que mejoremos la calidad, que es supuestamente el fin del mismo.
Les
hemos exigido que cesen en tales prácticas. Solicita un
representante sindical ante cualquier tipo de amonestación que te
quiera imponer la empresa.